De Inglaterra a Bilbao (1890–1908)
La plantilla del Athletic Club con la primera Copa de España, en 1903.
El fútbol en Vizcaya se dio a conocer en la década de 1890, gracias a que los ingleses que trabajaban en los puertos vizcaínos solían jugar partidillos de futbol en sus ratos libres; poco después se les fueron uniendo aficionados vizcaínos. El interés de los vizcaínos por este novedoso deporte fue aumentando, hasta que, en 1898, unos jóvenes del gimnasio Zamacois de Bilbao tuvieron la idea de fundar un equipo de futbol, como los existentes en Inglaterra; a este equipo le bautizaron con el nombre de Athletic Club, si bien el equipo no se constituyó legalmente hasta el 5 de abril de 1901.
En 1900 surgió el Bilbao Football Club. Ambos equipos solían disputar partidos amistosos que cada vez iban teniendo más relevancia entre los aficionados vizcaínos, llegando a haber bastante rivalidad entre los dos equipos. En la primavera de 1902, se celebró un torneo nacional de futbol para celebrar la mayoría de edad del rey Alfonso XIII. A este trofeo, se le bautizó con el nombre de Copa de la Coronación, y está considerado como el precursor de la Copa del Rey. Para disputarlo, el Athletic Club y el Bilbao F. C. crearon un equipo combinado con el nombre de Bizcaya, que se alzó con el título al ganar 2-1 al F. C. Barcelona en el hipódromo de Madrid.
En 1903, el Bilbao Football Club acordó en Junta General disolver la sociedad, ingresando a todos sus socios en el Athletic Club. Tras superar una dura crisis institucional, que casi le cuesta su disolución, el Athletic debutó, ese mismo año, en la recién creada Copa del Rey, proclamándose campeón; título que repitió al año siguiente.
«Pichichi» y la construcción de San Mamés (1908–1922)
Habían pasado 10 años desde la fundación del club y, al Athletic, se le empezaba a quedar pequeño el campo de Lamiako. La afición por el fútbol en Vizcaya había crecido sobremanera en los últimos años, y un cambio de campo se hacía cada vez más necesario. Tampoco el nuevo campo de Jolaseta, ubicado en el barrio de Neguri (Getxo), cubría las necesidades del club, que demandaba un campo propio y en condiciones, para un club en pleno crecimiento.
Un crecimiento justificado, ya que en 1910, luciendo ya camisola rojiblanca, el Athletic volvía a proclamarse campeón de Copa tras varios años de sequía, repitiendo el mismo éxito al año siguiente. En esos años, comenzaba a destacar la figura de un joven jugador, que daría mucho que hablar en los próximos años; Rafael Moreno Aranzadi, al que apodaban «Pichichi»
Para poner la guinda a un equipo ya campeón, ese mismo año se contrato al primer entrenador de la historia del club, el inglés Shepherd, que abandonó el club y fue sustituido al año siguiente por otro inglés, William Barnes.
Ya en 1913, el Athletic concluyó por fin la construcción de su ansiado campo, obra del arquitecto Manuel María Smith, y que se levantó en los terrenos situados junto al asilo de San Mamés, de quien tomó su nombre. El 21 de agosto de ese mismo año, se procedió a su inauguración, con un partido amistoso entre el Athletic y el Racing Club de Irún, que terminó con el resultado de empate a un gol. Pichichi fue el encargado de anotar el primer gol de la historia de San Mamés.
Llegó entonces una época exitosa para el Athletic, en la que conquistó tres veces consecutivas la Copa del Rey; en 1914, 1915 y 1916 respectivamente, siendo considerado por la prensa nacional, el mejor equipo de España. Con William Barness en el banquillo, el equipo del Athletic lo formaban los siguientes jugadores; Ibarreche bajo los palos, Solaun y Hurtado formando una férrea defensa, la tenacidad de Eguía, el coloso Belauste que imponía su presencia en el centro del campo al igual que su hermano Ramón, o la inquietante delantera formada por Iceta, Germán, Apón, Zuazo y Rafael Moreno, «Pichichi». Este último, había rechazado varias ofertas de clubes ingleses que le ofrecían un contrato profesional con muy buenas condiciones, sin embargo, él prefirió quedarse en Bilbao.
Concluida la temporada 1915-16, el Athletic pasó por un tiempo de crisis institucional y, no fue hasta 1921, cuando volvió a ganar un nuevo campeonato de copa. Este fue el último título para «Pichichi», que al término de la temporada 1920-21, se retiró definitivamente del fútbol. Algunas fuentes señalan, que tras retirarse, se dedicó al arbitraje. Poco después, el 1 de marzo de 1922, falleció a causa del tifus, cuando a penas contaba con 29 años de edad.
Fred Pentland y la «primera delantera histórica» (1922–1936)
La década de 1920 finaliza con la creación del campeonato de liga en latemporada 1928/1929. Este hecho coincidió con uno de los momentos más dulces de la historia del Athletic, que durante la década de 1930 ganó ocho títulos en seis años.
Durante los últimos años de la década de 1920, el Athletic fue reclutando a los mejores talentos del fútbol vizcaíno. Así, son fichados Blasco del Acero de Olabeaga en 1926, Unamuno del Alavés en 1927, del Barakaldo C.F.llegaron Lafuente en 1925 y Bata en 1929. Por su parte, del Arenas de Getxo recalaron Gorostiza en 1929 y Cilaurren en 1931. Del equipo de reservas del Athletic subieron jugadores como Chirri II y Garizurieta en 1927, Ispizua en 1928 o Iraragorri en 1929.
Bajo la dirección del míster Frederick Pentland, este equipo se alzaría con 2 campeonatos de liga (en las temporadas 1929/30 y 1930/31) y 4 campeonatos de Copa consecutivos (en los años 1930, 1931, 1932 y 1933). Ya sin Pentland, que no llegó a un acuerdo para renovar su contrato, el Athletic se hizo con dos campeonatos de liga más, los de 1933/34 y 1935/36.
De este equipo destaca la popularmente conocida como «primera delantera histórica» del Athletic, formada por Lafuente, Iraragorri,Bata (ganador del Trofeo Pichichi en 1930/31), Chirri II y Gorostiza (ganador del Trofeo Pichichi en 1929/30 y 1931/32). Con Blasco como guardameta, ganador del Trofeo Zamora en tres ocasiones (1929/30, 1933/34 y 1935/1936). Si bien estos premios no se instauraron hasta años después, les fueron concedidos con posteridad como acto de reconocimiento.
Mención a parte merece la goleada endosada al F.C. Barcelona (12-1) en la temporada 1930/31. Por parte del Athletic marcaron Bata (min. 2', 8', 24', 37', 57', 60' y 68'), Gorostiza (min. 27'), Lafuente (min. 36'), Garizurieta (min. 55') e Iraragorri (min. 83'), incluyendo un gol en propia meta del barcelonista Zábalo. Aquella temporada el Athletic concluyó la liga invicto.
Sin embargo, las andanzas de este equipo se cortarían de golpe en 1936, año en el que estalló la guerra civil española, hecho que obligó a suspender la liga durante cuatro temporadas.
Telmo Zarra y la «segunda delantera histórica» (1940–1955)
En diciembre de 1940 la Federación Española de Fútbol emitió una circular en la que ordenaba a los clubes la eliminación de todo extranjerismo antes del 1 de febrero de 1941, desde entonces y hasta julio de 1970, año en que se derogo el Decreto-Ley de 1940, el nombre oficial pasó a ser el de Atlético de Bilbao.
El campeonato de liga se reaunudó en la temporada 1940/41 y, el Athletic, se vio obligado a rehacer el equipo casi en su totalidad, ya que solo pudo disponer de cinco de los jugadores que formaban parte de la plantilla anterior a la guerra; Oceja, Zabala, Urra, Garate y Unamuno. El resto, habían emigrado de España o fichado por otros equipos; así, Blasco y Cilaurren ficharon por el River Plate argentino, mientras que Zubieta e Iraragorri se fueron al San Lorenzo de Almagro. Para recomponer el equipo y, como ya se hizo en épocas anteriores, se buscó a los mejores talentos en los equipos vascos de categorías inferiores. El Athletic logró formar un grupo sólido, forjando la que sería la «segunda delantera histórica» del club, formada por Iriondo,Venancio, Zarra, Panizo y Gaínza. Otros jugadores que formaban parte de la alineación titular eran Celaya, Bertol, Arqueta, Mieza, Nando y el prometedor portero Echevarría, ganador de un Trofeo Zamora en la temporada 1940/41, quien se retiró prematuramente en 1942 debido a una grave lesión. Su puesto en la portería lo ocupó Lezama, un jovencísimo guardameta que inició su carrera deportiva en Inglaterra, jugando para el Southampton F. C., y que más tarde regresaría a Vizcaya para jugar un año en el Arenas de Getxo, antes de recalar en el Athletic.
Este equipo logró hacerse con el campeonato de liga en la temporada 1942/43, además de ganar la Copa del Generalísimo durante tres años consecutivos; en 1943, 1944 y 1945 respectivamente. El último campeonato ganado por esta generación, fue la Copa del Generalísimo de 1950, en la que Telmo Zarra logró el récord de ser el jugador que más goles a marcado en una final copera, tras haber anotado 4 tantos. También fue subcampeón de liga en las temporadas 1940/41, 1946/47 y 1951/52, y de Copa en los años 1942, 1949 y 1953. Cabe destacar los 6 Trofeos Pichichi conseguidos por Telmo Zarra durante este tiempo.
El equipo de los «11 aldeanos» (1955–1960)
Ya en 1954, llegó al Athletic procedente del F. C. Barcelona, el entrenador Ferdinand Daučík, quien tenía la misión de renovar el equipo de la ya veterana «segunda delantera histórica», la cual disolvió para dar paso a una nueva generación de jugadores. El nuevo equipo estaba formado por jóvenes promesas provenientes del filial y de otros equipos vascos: En la portería, Carmelo sucedió al laureado Lezama, el resto del equipo lo conformaban Garay, Orúe, Canito, Mauri, Maguregui, Arteche, Markaida, Arieta, Uribe y Gaínza, único superviviente de la antigua delantera y capitán del equipo. Con este equipo, el Athletic volvió a proclamarse campeón de liga en la temporada 1955/56 y, de la Copa, en 1954/55, 1955/56 y 1957/58. En la temporada 1956/57 el Athletic debutó en la recién creada Copa de Europa; en esta competición eliminó al Oporto en la previa, al Honvéd en los octavos de final y, finalmente, cayó ante el Manchester United en los cuartos de final, a pesar de haber vencido en el partido de ida celebrado en San Mamés.
En 1958, el Athletic volvió a llegar a una final de Copa. En esta ocasión debía medirse ante el Real Madrid de Di Stéfano, que llegaba siendo campeón de liga y Copa de Europa. El Athletic pidió que la final se jugase en terreno neutral, pero finalmente se jugó en Chamartín, campo del club madrileño. A pesar de esta desventaja, el Athletic logró el título de Copa al ganar por 2-0, con goles de Arieta y Mauri. Este equipo pasaría a ser conocido en la historia del Athletic como «el equipo de los 11 aldeanos», ya que, el por entonces presidente Enrique Guzmán, durante la celebración del título, lanzó la famosa frase de «¡Con 11 aldeanos, les hemos pasado por la piedra!». En la temporada 1958/59, el Athletic logró endosar cuatro abultadas goleadas en tan sólo 21 días, los equipos goleados fueron el Sporting de Gijón (9-0), el Celta de Vigo (9-0), Osasuna (1-8) y el Betis (7-0).
Iribar y la primera final europea (1960–1980)
En 1960, el Athletic vendió al veterano defensa Garay al F. C. Barcelona, lo que supuso la primera venta millonaria de la historia del club. Con el dinero de esta venta se construyó enSan Mamés la tribuna Norte, bautizada como Tribuna Garay en honor al mítico jugador.
El 23 de septiembre de 1962, hizo su debut un nuevo guardameta que daría mucho que hablar en los próximos años; José Ángel Iribar. El meta guipuzcoano caló tan hondo entre la afición rojiblanca, que estos coreaban su nombre al grito de «¡Iribar, Iribar, Iribar es cojonudo, como Iribar no hay ninguno!». En la temporada 1966/67, el joven jugador del Athletic, Fidel Uriarte, se hizo con el Trofeo Pichichi con tan solo 23 años. En las temporadas 1965/66 y 1966/67 el Athletic logró alcanzar la final de Copa, pero en ambas ocasiones salió derrotado; no fue hasta 1969 cuando el Athletic volvió a proclamarse campeón de Copa. De este equipo campeón destacó la aportación de jugadores como Iribar, Sáez, Uriarte, Clemente o Rojo I. Poco después, la carrera futbolística de Javier Clemente, se vio truncada debido a una entrada criminal perpetrada por Marañón, jugador del Sabadell, de la cual «el rubio» no logró recuperarse.
Tras una década de pocos logros, en la década de 1970 el Athletic volvió a la senda de los éxitos. Tras quedar subcampeón de liga en la temporada 1969/70, se alzó con el título de Copa de 1972/73 y, en la temporada 1976/77, logró llegar a la final de la Copa de la UEFA tras eliminar a equipos como el A. C. Milan o el F. C. Barcelona. La final la jugó contra la Juventus a doble eliminatoria; en la ida ganó la Juventus por 1-0 y en la vuelta fue el Athletic quien venció en San Mamés, en este caso por 2-1. Sin embargo, el valor doble de los goles a domicilio dio la victoria al equipo italiano, que se alzó con el título en el mismo San Mamés. El Athletic alineó a los siguientes jugadores; Iribar, Lasa, Guisasola, Alexanco, Escalza, Villar, Churruca, Irureta, Amorrortu, Dani y Rojo I. En esa temporada el Athletic también aspiró a ganar la liga y llegó a la final de la Copa del Rey, pero al final terminó con las manos vacías, al ser derrotado en la tanda de penalties por el Betis.
La era Clemente (1980–1986)
La década de los años 1980 comenzó con la retirada definitiva de la portería de José Ángel Iribar, habiendo jugado 620 partidos con el Athletic y 49 con la selección española. Además se produjo la renovación de una plantilla ya veterana, con la llegada de nuevas promesas que harían historia con el Athletic. Javier Clemente se hizo cargo del banquillo del Athletic en la temporada 1981/1982. En esa temporada Andoni Zubizarreta logró la titularidad como meta del Athletic, en detrimento de Andoni Cedrún, hijo del ex-guardameta Carmelo Cedrún. En 1982 se jugó en San Mamés una de las fases de la liguilla del Mundial de España de dicho año, para la cual se realizó una remodelación del estadio. La temporada siguiente el Athletic conquistó el título de Liga, cosa que no lograba desde el año 1956. El título se celebró con un paseo en gabarra por la ría de Bilbao. Al año siguiente el Athletic volvió a proclamarse campeón de Liga por octava vez en su historia y además logró hacerse con el título de Copa que se disputó contra el F. C. Barcelona de Maradona. En aquella final el Athletic alineó al siguiente once: Zubizarreta, Goikoetxea, De Andrés, De la Fuente, Urkiaga, Liceranzu, Dani, Patxi Salinas, Endika, Urtubi y Argote. También cabe mencionar la aportación de Manu Sarabia, uno de los mayores goleadores de la historia rojiblanca. Además, el doblete de Liga y Copa dio al Athletic de forma automática la Supercopa de España.
El declive (1986–1996)
El final de la década de 1980 supuso un punto y a parte en la historia del club bilbaino; con la llegada del fútbol moderno y los grandes fichajes a la liga española, el Athletic se vio empequeñecido y no pudo mantener el nivel de competición, pasando de ser un club que luchaba regularmente por ser campeón, a un club cuya mayor aspiración era clasificarse para la Copa de la UEFA.
Tras la desaparición del último equipo campeón, el Athletic comenzó su declive con un 12º puesto en la temporada 1986/87. En la campaña posterior, con el entrenador Howard Kendall en el banquillo, el Athletic tiró de cantera para rejuvenecer el equipo, subiendo a jugadores como Patxi Ferreira, Andrinua, Alkorta, Garitano o Urrutia; alcanzando con ello la 4ª posición y, por consiguiente, clasificandose para la Copa de la UEFA. Pero no le fueron bien las cosas al Athletic, ya que en competición europea cayó eliminado en los dieciséisavos de final y, en la liga, se quedó en un intranscendente 7º puesto. Tras esto, el equipo se hundió y en los tres años posteriores no logró superar el 12º puesto en liga. En la temporada 1993/94 el Athletic dio muestras de mejora, logrando un 5º puesto que le daba derecho a jugar la próxima Copa de la UEFA. Pero solo fue un espejismo, ya que en las dos temporadas siguientes volvió a dar otro bajón, y por si fuera poco, en la temporada 1995/96 el Athletic cosechó la peor clasificación de su historia en liga hasta ese momento, acabando en 15º posición.
La generación del centenario (1996–2001)
Para la temporada 1996/97 el Athletic tomó medidas para reconducir la situación del equipo, contratando al entrenador Luis Fernández, e incorporando a la plantilla a los jugadores Imanol Etxeberria, y Ismael Urzaiz .El equipo titular lo conformaban otros jugadores de peso en el equipo como Bittor Alkiza, Aitor Larrazabal, Rafa Alkorta, Cuco Ziganda, Joseba Etxeberria o el propio Julen Guerrero. Así, el Athletic dio un gran salto de calidad y logró clasificarse para la Copa de la UEFA, quedando en 6ª posición.
Pero el presidente José María Arrate quería mejorar aún más el equipo de cara a la temporada 1997/98, la cual era una temporada especial debido a que el club celebraba su centenario. Para ello reforzó el euipo con las incorporaciones de Javi González, Mari Lacruz, Mikel Lasa y Txomin Nagore. Como fichaje estrella, el club se gastó 2000 millones de la antiguas pesetas (12 millones de €) en la contratación del defensa Roberto Ríos, el cual se convirtió en el fichaje más caro de la historia del Athletic. Gracias a ello, el Athletic se proclamó subcampeón de liga y se clasificó para jugar la Liga de Campeones de la UEFA. En la Copa de la UEFA de ese año el Athletic había caído en dieciseisavos de final contra el Aston Villa. La temporada siguiente, el Athletic no logró superar la fase de grupos en la Liga de Campeones. Por su parte, en el campeonato doméstico concluyó en 8º posición, a pesar de haber cosechado 60 puntos.
Tras esto, el equipo no terminó de funcionar y entró en declive. La temporada 1999/00 supuso el principio del fin para el equipo del centenario, acabando la liga en una desastrosa 11ª posición. Según los rumores del entorno rojiblanco, se hablaba de problemas en el vestuario; de hecho, a partir de esa temporada, la flamante estrella del equipo, Julen Guerrero, se vio relegado al banquillo para sorpresa de muchos. Luis Fernández fue destituído y su lugar lo ocupó Txetxu Rojo. A pesar del cambio de entrenador el equipo se hundió más y se pasó la temporada luchando por la salvación, la cual logró concluyendo la liga en 14ª posición.
Del renacer a la crisis (2001–2007)
Terminados los años 90, el Athletic entraba en una nueva década que no depararía nada relevante en la historia del club, siendo una etapa con pocos éxitos y en la que se vivieron varios años difíciles, en los que el club estuvo a punto de descender.
Al comienzo de la temporada 2001/02, el Athletic estrenaba nuevo presidente; Javier Uria, y nuevo entrenador; Jupp Heynckes, que realizaba su segundo ciclo en el banquillo rojiblanco. En los dos años que estuvo Jupp Heynckes, el equipo mejoró considerablemente, ya que estuvo luchando por clasificarse para la Copa de la UEFA hasta el último momento, además de llegar hasta semifinales de la Copa del Rey. Durante ese tiempo, el equipo se fue renovando poco a poco gracias a nuevos jugadores que subían de la cantera, y que lograban consolidarse; caso de Aranzubía, Del Horno, Luis Prieto, Murillo, Aitor Ocio, Gurpegi y Yeste. También se consolidaron otros jugadores provenientes de fuera como Orbaiz o Tiko.
Al final de la temporada, falleció de cáncer el presidente Javier Uría, por lo que el vicepresidente, Ignacio Ugartetxe, tomó el mando de forma temporal.
Para la temporada 2003/04, Jupp Heynckes abandonaba el banquillo para ser sustituido por Ernesto Valverde, un entrenador de la casa que acababa de subir del filial. Con Ernesto Valverde el Athletic se clasificó para la Copa de la UEFA, terminando la temporada en 5ª posición. Esta temporada también supuso la consolidación en el primer equipo de Andoni Iraola, que sustituía al retirado Aitor Larrazabal.
Durante el verano de 2004, se convocaron elecciones anticipadas, en las que Fernando Lamikiz fue elegido como nuevo presidente del club.
En la siguiente temporada 2004/05, el Athletic fue de más a menos. Por un lado, logró una goleada histórica en la Copa de la UEFA al ganar por 1-7 al Standard de Lieja, cayendo después eliminado en dieciseisavos ante el Austria de Viena. Y en la Copa del Rey volvió a llegar hasta semifinales, cayendo de forma dolorosa en los penaltis ante el Real Betis Balompié. A raíz de la eliminación en la Copa de la UEFA en febrero de 2005, las cosas empezaron a no marchar bien, ni el lo institucional ni en lo deportivo. Finalmente el Athletic concluyó la liga 9º y, el entrenador Ernesto Valverde, rechazó la oferta de renovación por discrepancias con la nueva junta directiva.
- El bienio negro
Últimos años (2007–actualidad)
A partir de 2005, el Athletic entraría en una época de crisis institucional y deportiva, que casi hacen descender al club. Contaría con la baja de dos de sus puntales en temporadas anteriores: Asier del Horno, traspasado al Chelsea, y Santi Ezquerro, que finalizaría contrato y firmaría con el F.C. Barcelona. Para sustituir a Ernesto Valverde en el banquillo, la junta directiva contrató al entrenador del S.D. Éibar, José Luis Mendilibar, proveniente de segunda división, el cual fue cesado debido al nefasto inicio de liga (el segundo peor de la historia del Athletic). Le sustituyó Javier Clemente, quien se sentaba por tercera vez en el banquillo rojiblanco. Con Clemente el equipo mejoró y logró la salvación en la penúltima jornada (1-2 en Riazor). Pero el técnico fue cesado antes de comenzar la nueva pretemporada debido a una mala relación con el presidente Fernando Lamikiz. Para la temporada 2006/07 puso al entrenador del filial, Félix Sarriugarte, que fue cesado a mitad de temporada, ya que el equipo se encontraba en puestos de descenso y no daba señales de mejoría. Antes de eso, el presidente Fernando Lamikiz, había dimitido tras la fuerte pitada que recibió al término de un partido de liga. Ana Urquijo tomó el sillón presidencial y puso a José Manuel Esnal "Mané" de entrenador. Después de una durísima temporada, peleada punto a punto, el Athletic logró salvarse en la última jornada de liga, en un partido de infarto frente al Levante U.D.. Estas dos temporadas fueron recordadas por los propios aficionados como "el bienio negro".
En el verano de 2007 se volvieron a celebrar elecciones anticipadas, cuyo vencedor fue Fernando García Macua. Macua fichó varios jugadores como el portero Gorka Iraizoz, el defensa Aitor Ocio o el centrocampista David López y contrató al entrenadorJoaquín Caparrós. Con esto, sumado a la consolidación de Fernando Llorente, Javi Martínez y Fernando Amorebieta, la situación del equipo mejoró notablemente y se mantuvo durante toda la temporada en la parte media de la clasificación, sin pasar apuros. La siguiente temporada 2008/09, supuso la confirmación de que el equipo se estaba recuperando positivamente, dejando atrás los fantasmas del descenso. En el mercado de invierno Gaizka Toquero se incorporó al equipo proveniente del S. D. Eibar, de Segunda División, club en el que estuvo cedido desde que el Athletic acometiera su fichaje meses atrás. Esa temporada el Athletic volvió a disputar una final de copa 24 años después, tras de eliminar a cuatro equipos de Primera División; Recreativo de Huelva, Osasuna, Sporting de Gijón y Sevilla. En la final cayó derrotado frente a un F.C. Barcelona que más tarde logró el triplete, al ganar la Liga, la Copa y la Champions League. Gracias a esa final, el Athletic se clasificó para disputar la nueva Europa League (versión renovada de la Copa de la UEFA) y para jugar la Supercopa de España contra el propio F.C. Barcelona, que de nuevo resultó vencedor.
A partir de la temporada 2009/10 el equipo entró en una etapa de crecimiento, en la cual comenzaron a emerger jóvenes promesas como Iker Muniain, Óscar de Marcos, Mikel San José, Markel Susaeta y Ander Iturraspe, si bien su participación aún era secundaria. Con un equipo hecho pero a la vez sin florecer, el Athletic llegó hasta dieciséisavos de final de la Europa League, mientras que en liga concluyó en octava posición. Finalizada la temporada, varios jugadores veteranos abandonaron el equipo;Joseba Etxeberria y Armando Ribeiro dieron por concluida su carrera futbolística, mientras que Fran Yeste e Iñaki Muñoz culminaron sus contratos.
La temporada 2010/11 el equipo continuó su progresión de forma ascendente, y las jóvenes promesas ya comenzaron a hacerse un hueco dentro del equipo titular, compitiendo con las recién emergidas esa temporada; Borja Ekiza, Jon Aurtenetxe, Ibai Gómez, EIgor Martínez, unas con más éxito que otras. El Athletic logró finalmente su objetivo de clasificarse para la Europa League, alcanzando la sexta posición con 58 puntos, los mismos que Sevilla (quinto) y Atlético de Madrid (séptimo). Además, Fernando Llorente batió su propio récord al marcar 18 goles en liga, cifra que no alcanzaba un jugador del Athletic desde 1994. Ese verano de 2011, se celebraron elecciones a la presidencia del club, de las cuales salió vencedor Josu Urrutia. Tras el cambio de presidente también hubo cambio de entrenador, así, Joaquín Caparrós fue sustituido por el argentino Marcelo Bielsa.